Podemos decir que siempre estamos motivados, ya que siempre nos sentimos impulsados a satisfacer una meta o a realizar un objetivo; y es difícil pensar que cualquier conducta (animal o humana) que no esté motivada. Cada individuo posee diversas necesidades y modos de satisfacerlas; por lo general, se es consciente de lo que le impulsa a uno a actuar, aunque se desconocen casi por completo, los motivos que impulsan a los demás a hacer lo que hacen.
La motivación se relaciona con el sistema de cognición de los individuos. Cognición o conocimiento representa lo que las personas saben sobre sí mismas y el ambientes que las rodean.
Se puede decir que la motivación permite mantener una cierta continuidad en la acción, que acerca al individuo a la consecución de un objetivo, y que una vez logrado habrá saciado una necesidad.
Cuando se habla de conducta motivada o motivación, se tiene tres características:
- Es sostenida, es decir, que persiste por períodos de tiempo que son relativamente largos.
- Se dirige a la realización de un objetivo
- Esta es una conducta que resulta de una necesidad sentida.
Tipos de motivos:
- Motivos no aprendidos: Son conocidos también como motivos de supervivencia o primarios. Son fundamentales para que el organismo logre sobrevivir o permanecer vivo. Por lo general son aquellos como excretar (eliminar desechos corporales), temperatura corporal equilibrada (abrigarse, protegerse), comer (satisfacer el hambre), respirar (oxigenar el cuerpo) beber ( calmar la sed).
- Motivos aprendidos: Son conocidos como motivos secundarios y motivos sociales. Estos motivos se van configurando por medio del contacto social. No son motivos necesarios y fundamentales para la supervivencia humana.
- Motivos combinados: Conocidos también como mixtos.Consisten en el resultado o mezcla de conductas aprendidas con conductas no aprendidas.
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